Según he aprendido en los documentales de National Geo.; el desierto tiene un clima extremo de calor y frío; infierno por la mañana y frío asotador por la noche.
Para los que estamos acostumbrado a vivir en Costa Rica, el clima por estos días de marzo, es cálido, sin embargo para nadie es un secreto que nuestro clima fluctúa entre el frío y el calor fuerte de la mañana, casi como un pequeño desierto.
Me pregunto si esto es simplemente una coincidencia, consecuencias del fenómeno del niño (que a su vez, tiene su raíz en los cambios climáticos) o de alguna manera una advertencia de Gaia, dándonos una ligera probada de lo que se nos avecina, como esfera de nieve en caída libre.
Me parece que debemos hacer conciencia colectiva y cambiar nuestros habitos, para entrar con una armonía con la naturaleza antes que sea demasiado tarde y no tengamos nada que heredar a nuestras futuras generaciones.
Buena nota,
J
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